Sabes que las predicciones de los clarividentes son una docena, ¿verdad? Ves las mismas una y otra vez. Todos parecen decir exactamente lo mismo. Sabes que van a tener razón porque todos los demás la tienen. Si preguntas a cualquier persona que haya hecho que un clarividente le lea su futuro, todos te dirán lo mismo: la lectura de un profesional es siempre más precisa que la de un aficionado. Esto puede ser cierto para algunas personas, pero para otras no lo es. Hay quienes simplemente no nos gusta depositar nuestra confianza en otras personas, por mucho que se preocupen por nosotros o nosotros por los suyos. Que otra persona les crea no significa que nosotros también debamos hacerlo. Dicho esto, hay un montón de buenas razones por las que deberías orientar a tu futuro yo cuando leas tus cartas con un vidente profesional mañana por la noche. Aquí tienes algunos consejos de un experto:
No escuches a adivinos o psíquicos
No necesitas escuchar a adivinos o psíquicos para tener una lectura agradable, segura y privada. Usted todavía puede tener una lectura clarividente profesional y confirmada con ellos, y todavía serán capaces de ayudarle con sus predicciones. Sólo que algunas personas están más dotadas que otras para esta habilidad en particular. Esto puede no parecer un gran problema para algunas personas. Pueden pensar: «Oye, es una profesional y sabe de lo que habla». ¡Y eso es genial! Siempre puedes pedir ayuda a tu profesional si te quedas atascado. Pero algunas personas tienen el don de leer las cartas, y se llaman adivinos. La única razón por la que deberías hacer caso a los adivinos o a los videntes es si quieres intentar cambiar los mensajes de las cartas, o si quieres intentar predecir el futuro. No es necesario.
Conoce tus cartas y léelas correctamente
A menudo verás libros y artículos sobre cómo leer las cartas, y cómo saber qué te dicen las cartas. Pero, ¿cómo saber qué cartas leer? No lo sabe. Por eso se llama «leer» las cartas. Cuando lees las cartas, intentas mirar el futuro. Intentas leer las cartas e interpretar los mensajes que te reflejan, de acuerdo con lo que sabes sobre las cartas y cómo están dibujadas. No se trata sólo de lo que te dicen las cartas, sino también de lo que revelan sobre ti. Las cartas no tienen por qué decirte todo lo que quieres saber. Su función es ofrecerte datos e información y dejarte con preguntas abiertas. Pero si no rellenan los espacios en blanco ni te dan todos los datos, tampoco pasa nada.
Habla con un profesional antes de leer las cartas
Que un profesional te lea las cartas es una buena forma de obtener una visión de lo que el profesional ve ante ti. Te da una mejor oportunidad de entender las cartas, y también obtendrás una valiosa visión de lo que el profesional piensa sobre ti y tu futuro. Hay muchas maneras de hacerlo. Puedes elegir a un profesional acreditado, o puedes ponerte en contacto con tu propio interés por la psicología o el espiritismo, y contratar a un lector especializado en ello. También puedes elegir que te lean las cartas, ya sea solas o junto con tus fotos, datos financieros y otros documentos personales. Cuando eliges que te lean las cartas, en realidad estás eligiendo que te lean el futuro. Y lo que realmente está haciendo es elegir que le lean su presente.
Confía en tu instinto
La mayoría de la gente le da mucha importancia a la idea de «probar las cartas». Pero las cartas no mienten, y leer las cartas no es una especie de juego de números. Se trata de tomar decisiones precisas e informadas en base a la información que se le da. No hace falta ser un clarividente para saber que no se debe tomar una decisión precipitada basada en la lectura de las cartas. A veces hay que esperar el momento y el lugar adecuados para tomar una decisión.
Utiliza el clarividente adecuado para el trabajo
La mayoría de las personas acuden a un profesional cuando buscan orientación sobre cómo resolver un problema o afrontar una situación. Saben que van a recibir información precisa, y hechos, y saben que sus preguntas serán respondidas. Un clarividente profesional es una persona que ha sido entrenada para utilizar su don de clarividencia para el bien de todas las personas. Sabe la diferencia entre un diagnóstico médico y un tratamiento médico, y sabe la diferencia entre una previsión financiera y una estrategia financiera. Los aficionados suelen tener dificultades con esto. Pueden pensar: «La lectura de un profesional siempre va a ser más precisa que la de un aficionado». Pero no es así. Un profesional con experiencia suele ser capaz de decirte lo que está ocurriendo en tu momento presente, así como tu futuro lejano, mejor que un aficionado. También puede decirte cosas que están sucediendo en tu momento presente, pero de las que aún no eres consciente.
Conclusión
El futuro es un lugar extraño y desconocido. No puedes predecirlo, y no deberías intentar predecirlo. Todo lo que puedes hacer es confiar en tus instintos y ser paciente. El futuro contará su propia historia.
